Vivimos tiempos convulsos en los que lo viejo no acaba de morir…, ¡pero lo nuevo sí acaba de nacer! Y no tiene por qué ser peor.

Podremos utilizar las nuevas tecnologías para centralizar o repartir el poder, pero lo que no pueden es detenerlas. Wikipedia era un sueño y en una década se ha convertido en la pesadilla de las enciclopedias hasta enterrar el año pasado a la británica. ¡Y preparaos para la política 4.0
Las ideas interesantes que entendían los cambios tecnológicos son de pequeños empresarios emprendedores. La tecnología está cambiando el mundo de arriba abajo.
Los bancos centrales son dinosaurios voraces, torpes y lentos. Y nuestro sistema monetario es una fábrica de parados estructurales. Está diseñado para generar deuda impagable que nos obliga a producir más y más con menos inversión sostenible: ni ética ni ecológica. Necesitamos alternativas. Esas reglas suponen deuda impagable y nos abocan al abuso sistemático y las crisis financieras cíclicas y frecuentes. Pero es que la descentralización de la información pondrá a la banca contra las cuerdas.
Es todo un paradigma de nuevas relaciones económicas, como el consumo colaborativo que internet hace posible en los móviles. Hoy puedes alquilar y compartir coche (Car sharing), vivienda (Airbnb). En China ya hay 500 millones de personas on line, el 20 por ciento desde un smartphone. En India se conectan más a internet por móvil que por ordenador. Y Latinoamérica es hoy un coloso on line del móvil.¿Se acuerda de la Enciclopedia Británica? Hace sólo una década era una realidad centenaria con un futuro sólido y espléndido y Wikipedia, sólo un puñado de zumbados. El año pasado los zumbados obligaron a la Británica a cerrar. Preparaos para muchas historias similares.